Fósiles, Biblia y evolución

¿Prueban los fósiles la evolución darwiniana?
Dr Timothy Standish
La afirmación de que los fósiles “prueban la evolución” aparece con frecuencia en publicaciones y libros de texto. Sin embargo, cuando estudiamos con detalle el registro fósil encontramos varias características de los fósiles que apoyan la validez de la historia bíblica, cuestionando al mismo tiempo la evolución darwiniana:
  1. Complejidad: La doctrina de la Creación predice que la complejidad de los organismos antiguos debería ser similar o incluso mayor que la de los organismos actuales. Según el darwinismo, por el contrario, los organismos evolucionaron durante largos períodos de tiempo desde lo simple a lo complejo. Algunos organismos antiguos pueden haber sido diferentes de los que viven en la actualidad, pero sus fósiles revelan que no eran menos complejos. Esto indica la necesidad de un Creador para diseñarlos y fabricarlos.
  2. Ecología: La Biblia afirma que Dios creó un complejo conjunto de organismos que interactuaban entre ellos y con su hábitat, animales herbívoros en tierra, peces en el agua y pájaros en el aire. Según Darwin tanto los organismos como las relaciones entre ellos se desarrollaron lentamente. Las criaturas fósiles, incluso cuando se encuentran en forma individual, no hubieran podido vivir aisladas. Los animales necesitan plantas para alimentarse y todos los organismos presentan complejas relaciones ecológicas entre sí. Así pues, la complejidad no se encuentra únicamente en los organismos fosilizados individuales; del estudio del registro fósil también se deduce una elevada complejidad ecológica en todos los antiguos ecosistemas.
  3. Diversidad: Según el libro del Génesis, Dios creó todo tipo de plantas y animales. El Darwinismo afirma que la diversidad surgió lentamente cuando una especie de organismo evolucionó hasta convertirse en otra o se dividió para dar lugar a varios tipos. Cuando diferentes grupos de organismos aparecen en el registro fósil, lo hacen de repente y con una gran diversidad. Sin embargo, es raro encontrar evidencias que apoyen la evolución gradual de alta diversidad a partir de baja diversidad.
  4. Aparición súbita: La creación en seis días requiere que los organismos aparecieran de repente cuando Dios los creó, mientras que el darwinismo afirma que los organismos evolucionaron lentamente de otros organismos pasando por una pequeña transformación tras otra hasta que la línea se extinguió, o hasta convertirse en los organismos que vemos hoy en día. El registro fósil carece de una secuencia coherente de antepasados y descendientes uniendo los principales grupos de organismos. Aunque los fósiles de la parte inferior de la columna geológica tienden a ser distintos de las criaturas actuales, los "eslabones perdidos" brillan por su rareza.
  5. Entierro rápido: El diluvio del Génesis proporciona un mecanismo viable para enterrar rápidamente un gran número de plantas y animales. La Geología uniformista postula erosión lenta y acumulación gradual de sedimentos pero la mayoría de los fósiles se formaron cuando los organismos fueron enterrados rápidamente, normalmente en un entorno acuoso. Aunque el entierro catastrófico y la abundancia de agua son congruentes con la historia del Génesis acerca de una inundación global, algunos paleontólogos proponen muchas catástrofes más pequeñas para explicar la formación de los fósiles.